Las democracias representativas se han vuelto cada vez más imprevisibles. La identidad de partido y de clase han quedado desfiguradas y en una sociedad cada vez más liquida e inestable, la volatilidad electoral es habitual. En este contexto cambiante, las encuestas y sondeos electorales tratan de arrojar luz sobre el comportamiento electoral de los ciudadanos, sin embargo ¿Qué efectos políticos tienen estos estudios?
Durante la campaña electoral los medios acostumbran a contratar empresas demoscópicas privadas que elaboran sondeos y previsiones de lo que sucederá en la campaña electoral. De estos datos, los medios extraen titulares y gráficos que ofrecen a la ciudadanía como un reflejo del zeitgeist o del clima de opinión del momento. Se convierten así, en un actor con capacidad de influir sobre la opinión pública y sobre la percepción política de la ciudadanía y pasan a ocupar un lugar en el debate público. Sobre esta cuestión, Lourdes Vinuesa (2016) afirma que las encuestas electorales se convierten en una suerte de oráculo de la ciudadanía y los medios, que son los que publican e interpretan los sondeos y actúan como un segundo oráculo al seleccionar y encuadrar la información.
Han sido muchos los autores que se han dedicado el estudio de los efectos políticos de las encuestas electorales y la principal preocupación siempre ha sido de qué manera podían estas influir sobre el voto. En la mayoría de los casos, podemos hablar de dos grandes efectos: el efecto bandwagon y el efecto underdog (McAllister & Studlar, 1991; Schmitt‐Beck, 2015; Stolwijk, 2017). El primero de ellos se refiere a la posible movilización de electores hacia el partido ganador y el segundo tiene que ver con la decisión de los electores de votar al candidato más débil. Aunque es muy difícil cuantificar estos efectos, se sabe que ambos están sujetos a condiciones específicas de cada elección.
Ya en la década de 1950 se apuntaba a que parte de la ciudadanía decide el voto en función de sus expectativas sobre el resultado de las elecciones y que en consecuencia, los datos publicados durante la campaña electoral tienen un efecto político al generar una serie de expectativas. De esta forma, cuando los electores escogen a un candidato o candidata esperando que gane hablamos de efecto bandwagon y si ocurre lo contrario, de efecto underdog. Otro impacto que pueden tener las encuestas y que quizá sea más conocido es el voto útil. En este caso el votante percibe que hay un partido que cuenta con ventaja y que tiene opciones reales de gobernar o de obtener representación y lo escoge. En ese sentido, es habitual que los partidos traten de convencer a los electores de que si optan por su formación, su voto será de utilidad. Este fenómeno se da sobre todo entre partidos que comparten espectro ideológico y que compiten por los mismos votantes.
Vemos así, que los sondeos y encuestas electores que se publican periódicamente tienen un efecto sobre los electores y sobre la campaña. En el caso de las elecciones al parlamento vasco del 12 de julio se han publicado numerosos sondeos además del estudio preelectoral del CIS. A pocos días de que finalice la campaña y el último día que se permite publicar este tipo de informaciones, extraemos una serie de apuntes sobre las prospecciones ofrecidas por los medios de comunicación.
Sondeo de 40db para EL PAÍS: https://elpais.com/espana/2020-07-05/urkullu-acaricia-el-mejor-resultado-del-pnv-en-40-anos.html
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- Titular: Urkullu acaricia el mejor resultado del PNV en 40 años. Los nacionalistas podrían obtener hasta 32 escaños, equiparando la marca de 1984, según el sondeo de 40db para EL PAÍS
- La gestión de la pandemia del Gobierno Vasco es ligeramente mejor valorada que la del ejecutivo estatal.
- Sobre la participación, a la pregunta “Como consecuencia de la crisis de la covid-19 mucha gente prefiere evitar aglomeraciones o espacios cerrados por cuestiones de salud ¿Cómo de probable es que vote…?” un 19,2% de los encuestados afirmar que es muy probable y probable que no vayan a votar. Hay que tener en cuenta que la formulación de la pregunta parece esconder una intencionalidad pero el número no deja de ser sorprendente.
- Según este sondeo, Vox se quedaría con un 0.5% de voto y no obtendría escaño.
- Equo también quedaría fuera del Parlamento Vasco.
- El número de indecisos sigue siendo alto, hay un 26% que no sabe o que no responde sobre quien votara.
- La estimación muestra como EH Bildu se consolida como líder de la oposición. El resultado de Elkarrekin Podemos no es nada bueno para la formación morada que se desinfla. PSE recupera los escaños que perdió en 2016.
Encuesta de Ikerfel para EL CORREO
- Titular: El PNV refuerza su ventaja, la coalición con el con el PSE se consolida y el PP+Cs cae.
- El sondeo que atribuye mayor bajada para PP+Cs que perderían 4 escaños.
- El último escaño de Araba será el más disputado, por 1000 votos.
- El 49% valora muy negativamente que Urkullu decidiera celebrar elecciones en julio. Especialmente los votantes de EH Bildu y Podemos.
- El 51% prefiere completar las transferencias pendientes del actual estatuto que redactar uno nuevo.
- Vox se queda en un 1,5% de voto.
- Participación: 61,1%.
EITB FOCUS https://www.eitb.eus/es/tag/eitb-focus/
- Titular: Álava clave el 12 de julio para que Vox consiga su primer escaño en el Parlamento Vasco.
- Participación del 61,1%.
- La coalición PP+Cs pierde 3 escaños y cae en porcentaje de voto, pierde fuerza en Álava.
- El pacto de gobierno entre PNV y PSE tendría una holgada mayoría absoluta.
- Elkarrekin Podemos perdería un escaño por cada territorio.
- Entre los que votaran por correo, el 46,6% lo harán porque estarán de vacaciones y el 32% por miedo al contagio.
- Una vez mas el PNV obtendría sus mejores resultados en Bizkaia pero mejoraría su porcentaje de voto en Araba considerablemente.
- Equo está ausente en prácticamente todo el sondeo.
Efectos posibles de los sondeos en las elecciones del 12 de julio
El discurso genera realidad. Y el discurso mediático prácticamente, la materializa. Así, los titulares e interpretaciones de los medios de comunicación en torno a los datos impactan en la opinión pública y la moldean. A continuación, analizamos como los anteriores sondeos pueden influir en el electorado durante la última semana de la campaña.
Tanto el sondeo de El PAÍS como el de EL CORREO destacan la holgada victoria y posible repetición de gobierno de coalición con el PSE. Esto puede suponer un riesgo para el PNV y es que al mostrar todos los sondeos una diferencia tan amplia la segunda fuerza, su votante se desmovilice. Sin embargo, uno de los efectos que más ha beneficiado a los nacionalistas durante los últimos años es uno de los que mencionábamos en la introducción: el efecto bandwagon. Las amplias mayorías del PNV pueden atraer al votante indeciso al ver que es la opción de la mayoría de la sociedad. Tanto es así, que según el estudio preelectoral del CIS el 18,9% de las personas que votaron en blanco en 2016 han afirmado que votarán a los jeltzales el domingo.
Sobre el nivel de participación, tanto FOCUS como EL CORREO coinciden en un 61,6% de participación. Se trata de un porcentaje similar al de otras elecciones que puede generar una sensación de normalidad y animar a votar a los últimos indecisos. Sin embargo, hay un factor que los sondeos no pueden medir, el miedo a los posibles contagios y el ambiente electoral, que con mítines reducidos y transmitidos online, sin contacto físico y en mitad de un verano atípico, habrá que ver cómo afecta a la jornada del domingo para la que se pronostica lluvia.
Equo no aparece en los gráficos de los medios. Se pronostica que no obtendrá representación y esto puede tener dos efectos: puede producir el efecto underdog y atraer electores que ante su indecisión escojan el partido más débil en las encuestas o pueden simplemente, dejarlo fuera de juego al no presentarlo como un partido con opciones.
El titular de EITB FOCUS destaca la posibilidad de un escaño para VOX en Álava. Parte del electorado ve a la formación de ultraderecha como una amenaza para la democracia y así lo expresan también la mayoría de los partidos. En ese sentido, el titular puede movilizar al votante en Álava y aumentar el porcentaje de participación en dicho territorio, produciéndose un fenómeno similar al que se ha dado en las anteriores elecciones generales en las que se trató de reactivar al votante de izquierdas para evitar la subida de Vox. Sin embargo, EL CORREO apunta que el último escaño del territorio se disputara poro 1000 votos entre EH Bildu, PSE y Podemos. Por tanto, el último diputado de Álava será uno de los interrogantes de la jornada.
El posible trasvase de voto en relación a las elecciones de 2016 parece marcado por los 4 nuevos diputados que gana el PNV. Si reparamos a los datos preelectorales del CIS (tabla inferior), podemos ver que un 19,3% de los votantes de PP y Cs en 2016 elegirán a los jeltzales esta vez y por tanto, podemos intuir que alguno de los diputados que pierda la coalición ira para el PNV, más aun si tenemos en cuenta los titulares de los medios que hemos analizado y sus posibles efectos.
Asimismo, los entre uno y dos escaños que gana el PSE parecerían poder venir de la perdida de Elkarrekin Podemos. Sin embargo, los datos del CIS afirman que únicamente un 1,5% de las personas que votaron a la coalición morada en 2016 votaran ahora en PSE. Por otro lado, vemos que un 10,1% de las personas que no tenían edad para votar en 2016 apostara por los socialistas vascos el domingo y que la formación de Mendia, también recogerá voto de Ciudadanos (un 6,9%).
Lo único que está claro, es que el porcentaje de indecisos sigue siendo alto y que la campaña aún no ha terminado y que por tanto, los resultados pueden variar. Lo atípico de una jornada electoral marcada por una pandemia mundial y en mitad del verano hará del domingo un día de posibles sorpresas.